Se está hablando mucho del cambio de modelo en el sistema financiero, de la necesidad de cambiar las cosas , pero en realidad, no sabemos exactamente de qué se está hablando. La banca privada en España tiene sus dias contados, al menos tal y como está planteada en la actualidad. La sofisticación y las presentaciones «de colores «ya no impresionan .Los extractos enrevesados donde uno no sabe exactamente lo que tiene ,está dando paso a la demanda de tener muy claro qué dinero se tiene, qué dinero se tuvo y en definitiva : como ha ido la «cosa» desde el inicio de la relación con el banco.
La figura del asesor personal sería mucho mas efectiva si de verdad tuvieran una clara vocación de servicio al cliente. Esto que parece tan sencillo, no lo es, o al menos no se practica, por mucho traje y parrafada financiera que nos den. Pero la culpa no es de ellos ( o ellas, a ver si Aido me pone multa) sino de las propias instituciones que no dan la formación adecuada.
Ni se imaginan lo que puede proporcionar una adecuada formación financiera no solo a los asesores especializados ( gente joven, con ganas y sin experiencia) sino al resto del elenco bancario que conforman muchas de nuestras «sufridas» oficinas bancarias.
Es precisamente en estos momentos de crisis de sistema cuando tenemos que saber que sólo triunfarán los que mejor preparados estén. No los que mejores productos tengan, sino los que mejor traten al cliente. ¿Y qué significa tratar bien al cliente?, a parte de ayudarle a escoger lo mejor para el en éste momento ( y no tanto para el banco ) es atenderle con eficiencia. Asi de simple .
La eficiencia se demuestra en la prontitud a la cuestión solicitada . La eficiencia es distribuir perfectamente el trabajo, llamar al cliente ante cualquier duda y decirle siempre la verdad lo antes posible, aunque la verdad suponga a veces, perder al cliente.
Cuando una persona deposita su ahorro en la entidad que sea está realizando un acto de fé importante y esta teniendo una confianza a priori que debería ser compensada lo antes posible. No puede una persona/cliente esperar una respuesta del banco para una «retrocesión» o para una «autorización» simple esperar mas de 24 horas.
Creo personalmente, y lo digo con conocimiento de causa ya conozco muy bien desde dentro, el sistema de banca privada en España,que falta mucha formación. Financiera, por supuesto, pero formación ética también. Cuando los empleados de banca se den cuenta de verdad que el cliente es su fuente de ingresos, vamos, su nómina, entonces estaremos viendo cambiar el modelo….pero me temo que, de momento, vamos a tener que seguir esperando.
Un poco lo que hablábamos ayer